Prensa muslima

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CONSTRUYENDO LA ESPAÑA PLURAL

Aún recordamos aquellos días en que comenzaba la apertura política y se legalizaba el partido comunista. Escuchábamos al presidente del gobierno de la transición diciendo que era profundamente demócrata y anticomunista, que actuaría y lucharía contra el comunismo. Había gente de edad que se lamentaba por esos días diciendo que para qué se hizo una guerra civil si luego llegaban a España igualmente los comunistas, los rojos.

D. Santiago Carrillo, con los miembros de su partido, tuvo grandes problemas legales y con la Administración durante esos primeros años de democracia incipiente, como todavía en la actualidad continúan teniendo los musulmanes españoles.

Hoy por fin vivimos una pluralidad política con absoluta tranquilidad y escuchamos a los líderes de Izquierda Unida con normalidad democrática, sin convulsiones sociales; pero ¿y la pluralidad religiosa? Todavía la estamos construyendo. Una parte de la población española soporta a musulmanes y a judíos, muy a su pesar, y sabiendo que deben existir como en su día hubo que legalizar a los rojos; pero aun cuando han pasado muchos años desde la Constitución de 1978, siendo habituales los sindicatos que no son solo cosa de izquierdistas, mucha población se indigna y se resiste a que se haga cumplir la Carta Magna y se normalice la convivencia plural religiosa. Incluso hoy, de representantes ministeriales se escucha que "no tendrán más remedio" que cumplir la ley y la Constitución y dar sus derechos a los musulmanes.

Se ve con normalidad la financiación de todos los partidos políticos representativos por parte del Estado; pero todavía no se acepta la pluralidad religiosa y que se financie con un mínimo de sostenimiento a todas las entidades religiosas con acuerdos con el Estado, solo lo conciben de los cristianos católicos, se resisten a aceptar la pluralidad religiosa.

Muchos domingos cojo el autobús en el que montan familias enteras cristianas para ir a misa, y también familias musulmanas para ir a la zalá y para que los niños pasen un rato con sus amiguitos en la mezquita. Los musulmanes sabemos que los cristianos van a la iglesia; pero los cristianos no saben que vamos a la mezquita, no saben nada de nosotros, y sin embargo somos iguales y hacemos lo mismo.

Quizás un día suba al autobús y vea sentados, uno al lado del otro, y charlando como buenos vecinos y hermanos a una muslima practicante con una cristiana observante, a un afiliado a IU con uno del PP, a un chaval seguidor del Atlético de Madrid con otro del Real Madrid y otro del Barça, con absoluta normalidad, con familiaridad... esperemos que sea pronto y que así Dios lo quiera. OjAlá. §

5/03/02

 

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